El gol Adrián Ramos, a favor del Granada, en el minuto 76 del partido contra el Albacete, desató a una afición que se encontraba a kilómetros de ambos equipos. Pamplona se teñía de rojo para celebrar un resultado que catapultaba a su equipo, el Osasuna, a la Primera división. Los jugadores rojillos, que habían seguido el encuentro desde el Sadar, no tardaron en llegar hasta la plaza del Castillo para sumarse a una fiesta en la que no faltaron las bengalas, la música y los cánticos emocionados de los forofos.
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| Un aficionado muestra una bufanda Indar Gorri bajo la luz de una bengala. |
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| Adriane Hernández y Brandon Thomas Llamas llegan a la plaza del Castillo emocionados. |
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| Aficionados rojilos esperan la llegada del equipo. |
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| Roberto Torres. |
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| Jagoba Arrasate, entrenador de Osasuna, fue recibido con el aplauso y agradecimiento de la afición. |
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| Los seguidores de Osasuna, conscientes del futuro incierto de Rubén García, no dudaron en suplicarle que se quede en el equipo la próxima temporada con gritos de "¡Rubén quédate!". |
El martes la fiesta continuó en la capital navarra. Miles de osasunistas se congregaron junto al Palacio de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona, lugares en los que fue recibido el equipo, para ver de cerca a los futbolistas.
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| El equipo saluda desde el balcón del Palacio de Navarra. |
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| Jagoba Arrasate y Oier Sanjurjo animaron al público desde el balcón. |
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| Joseba Asirón saluda a los jugadores en la puerta del Consistorio. |
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| Los jugadores saludan desde el balcón del Ayuntamiento de Pamplona. |
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| Varios niños intentan llamar la atención de los jugadores a su salida del Ayuntamiento de Pamplona. |
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| Rubén García saluda a unos aficionados. |
